Siete claves para un hogar más seguro y saludable

Siete claves para un hogar más seguro y saludable

Los alimentos que contienen bacterias, virus, parásitos o sustancias químicas nocivas causan más de 200 enfermedades, que van desde la diarrea hasta el cáncer.  Aquí te dejamos las claves para tener un hogar más seguro y saludable.

El cuidado de la salud es importante para usted y toda su familia. ¡Siga estos pasos sencillos y económicos para ayudar a detener muchas enfermedades infecciosas antes de que aparezcan!

 

      1.- Lava tus manos con frecuencia

Mantener tus manos limpias es una de las mejores maneras de evitar las enfermedades y su contagio. Al lavarte las manos te deshaces de gérmenes que pudiste haber adquirido de otras personas, de las superficies que tocas y animales con los que tienes contacto.

 

       2.- Limpia y desinfecta las superficies con regularidad

Limpiar y desinfectar son dos cosas distintas. La limpieza quita los gérmenes de las superficies, mientras que la desinfección realmente los destruye.

Generalmente, basta limpiar con agua y jabón para que desaparezca la suciedad y la mayoría de los gérmenes, pero a veces es conveniente desinfectar si se quiere alcanzar un mayor nivel de protección contra los gérmenes.

Los desinfectantes contienen ingredientes que realmente destruyen las bacterias y otros gérmenes. Consulta la etiqueta del producto para asegurarte que diga ‘Desifectante’ y tenga el número de inscripición de la EPA.

Desinfecta las zonas donde puede haber una gran cantidad de gérmenes peligrosos y donde exista la posibilidad que estos gérmenes se transmitan a otras personas.

En la cocina: limpia y desinfecta el mostrador y otras superficies antes, durante y después de preparar cualquier alimento (especialmente carnes rojas y de aves).

Al limpiar las superficies, no permitas que los gérmenes queden en los paños o toallas de limpieza.

Utiliza: Toallas de papel que puedan desecharse, trapos o toallas de tela que después se laven con agua bien caliente, ó paños desinfectantes desechables que limpian y también desinfectan.

 

        3.- Manipula y prepara los alimentos de manera segura

Cuando se trata de prevenir enfermedades de origen alimentario, hay cuatro pasos simples que debes poner en práctica cada día. Estos pasos son sencillos y te ayudarán a proteger de bacterias alimentarias dañinas.

  • Limpiar

Los gérmenes que provocan enfermedades alimentarias pueden propagarse por la cocina y llegar a tus manos a través de tablas para cortar, utensilios, mostrador de cocina y alimentos. Aquí te enseñamos a detener la propagación de gérmenes.

  • Separar

La contaminación cruzada se produce cuando una bacteria se propaga desde un alimento hasta una superficie y de esta a otro alimento, o de un alimento a otro.

Evita la contaminación cruzada con las siguientes recomendaciones:

  • Separa la carne cruda (roja, de aves y pescado) y los huevos, de los otros alimentos que están en tu carrito de alimentos, en bolsas del mercado y en el refrigerador. Asegúrate de usar las bolsas de plástico disponibles en las secciones de carnes, frutas y verduras del supermercado.
  • Utiliza una tabla para cortar frutas y verduras frescas, y otra para carne cruda roja, de aves y pescado.
  • Nunca coloques un alimento cocido en un plato que previamente haya contenido carne cruda o huevos
  • No permitas que los jugos de las carnes, pescado, aves o los huevos goteen sobre otros alimentos en el refrigerador. Utiliza recipientes para evitar que estos alimentos estén en contactos con otros.
  • Nunca uses pro segunda vez marinadas que se usaron con anterioridad para alimentos crudos, a menos que las hagas hervir previamente.

 

  • Cocinar

Los alimentos se cocinan de manera segura cuando se calientan durante un tiempo suficientemente prolongado y a una temperatura lo suficientemente alta como para matar las bacterias dañinas causantes de enfermedades alimentarias.

La temperatura es diferente para cada tipo de alimento. La única manera de saber con certeza que la carne se cocina a una temperatura segura consiste en usar un termómetro para alimentos.

  • Enfriar

Las temperaturas bajas hacen más lento el crecimiento de las bacterias dañinas. Por eso, refrigera los alimentos rápidamente. No llenes el refrigerador en exceso, de modo que el aire frío pueda circular y mantener seguros los alimentos.

• Mantener el refrigerador en una temperatura constante de 40oF o menor es una de las formas más eficaces de reducir el riesgo de enfermedades alimentarias. Utiliza un termómetro para asegurarte de que la temperatura sea constantemente de 40oF o menor.

• La temperatura del congelador debe ser de 0 F o menos.

• Planifica tus compras, compra alimentos perecederos tales como productos lácteos, carne fresca y alimentos cocidos calientes al final de tu recorrido.

Refrigera los alimentos tan pronto como sea posible para extender su duración mientras estén almacenados. No dejes afuera alimentos perecederos durante más de dos horas.

• Si estás preparando alimentos para un picnic, no olvides incluir un paquete de hielo para mantenerlos frescos.

• Guarda el sobrante de manera adecuada.

 

       4.- Vacúnate

Vacunarse es fácil y tiene un bajo costo, lo más importante de todo, salva vidas. Asegúrate que tú y tus hijos reciban las inyecciones sugeridas por el doctor o proveedor de atención médica en el momento adecuado, y mantén registros de todas las vacunas de la familia completa. Además, pregunta a tu doctor sobre programas especiales de vacunación gratuita para tus hijos.

Los niños deben ser vacunados por primera vez antes de los 2 meses de edad. Deben recibir dosis adicionales cuatro veces o más antes de su segundo cumpleaños.

Los adultos necesitan reactivar sus vacunas contra el tétanos y la difteria cada diez años. También con frecuencia se necesitan vacunas de protección contra enfermedades antes de viajar a otros países.

 

       5.- Usa los antibióticos de manera adecuada

Los antibióticos son medicamentos poderosos que se usan para tratar ciertas infecciones bacterianas, y deben administrarse exactamente como lo indica su proveedor de atención médica.

Los antibióticos no sirven para combatir virus como los del resfrío o de la gripe. Eso significa que los niños no necesitan un antibiótico cada vez que están enfermos.

Si te enfermas, los antibióticos no siempre ayudan. Si se usan de manera incorrecta, pueden provocar que las bacterias se hagan resistentes al tratamiento, y como consecuencia, hacer más difícil la curación de las enfermedades. Cuando tenga dudas, consulta con tu proveedor de atención médica. Además, sigue siempre las instrucciones de la etiqueta del antibiótico al pie de la letra.

 

      6.- Ten cuidado con las mascotas

Las mascotas proporcionan mucho bien a las personas, por ejemplo, consuelo y compañía, entre otras cosas. Sin embargo, algunos animales también pueden contagiar enfermedades a los seres humanos. Ten en cuenta estos consejos prácticos para lograr que la relación con tu mascota sea alegre y saludable.

  • Las mascotas deben ser adoptadas de un refugio de animales, o comprarse en una tienda de mascotas o en un criadero con reputación.
  • Todas las mascotas deben ser examinadas regularmente por un veterinario. Respeta el cronograma de vacunación recomendado.
  • Obedece las leyes locales relacionadas con collares y correas.
  • Limpia a diario las cajas de arena sanitaria. Nota: las mujeres embarazadas no deben limpiar tales cajas.
  • No permitas que los niños pequeños besen a las mascotas o pongan sus manos u otros objetos en su boca después de tocar animales.
  • No permitas que los niños jueguen en lugares donde los animales hacen sus necesidades.
  • Mantén cubierto el arenero de tus hijos mientras no lo estén usando.

 

      7.- Evita el contacto con animales silvestres

Los animales silvestres pueden transmitir enfermedades dañinas para ti y tu mascota; pero hay simples medidas de precaución que puedes tomar para evitar el contacto con una variedad de especies.

  • Para mantener tu casa libre de animales silvestres, no dejes alimentos en los alrededores y mantén bien cerrados los contenedores de basura.
  • Despeja los alrededores de la casa quitando malezas, pasto y escombros para que no haya sitios donde puedan anidar ratones y otros roedores.
  • Asegúrate de sellar todos los agujeros de entrada que descubras en el interior o el exterior de tu casa.
  • Utiliza repelente contra insectos para evitar garrapatas. Haz un “control contra garrapatas” de rutina después de pasar un tiempo en espacios abiertos. Las garrapatas deben quitarse inmediatamente con pinzas, haciendo una presión suave pero firme hasta liberar su mordida.

 

 

 

⇒ Con información de  www.Cdc.go/ounceofprevention y Who.int

 

Denisse Espinoza