Antes de excederte en el consumo de alcohol recibiendo el nuevo año, conoce a fondo sus efectos en tu organismo

 

El abuso en el consumo de alcohol es muy común en la celebración de Fin de Año, lo cual causa daños considerables a tu cuerpo. Es por ello que hemos preparado este artículo con las principales razones por las que deberías considerar seriamente beber con moderación para evitar estragos en tu organismo.

Los daños que causa el alcohol en el cuerpo son innumerables, principalmente porque el etanol –uno de sus compuestos- es una droga psicoactiva que provoca muchos efectos secundarios, alterando gravemente el organismo dependiendo de la cantidad de alcohol ingerido, así como de las circunstancias. Si se consume licor con el estómago lleno, por ejemplo, los efectos en el organismo son menores que si se lo toma con el estómago vacío.

¿Cómo actúa el alcohol en el organismo?

. Las membranas de las células no pueden detener su paso y, ya estando en la sangre, se riega por la mayor parte de tejidos que componen el cuerpo.

Con el consumo excesivo se pierde fácilmente la consciencia, pero si el consumo es extremadamente alto puede provocar envenenamiento y hasta producir la muerte. Un alto porcentaje de alcohol en la sangre puede provocar un paro cardiorespiratorio, o incluso puede provocar muerte por asfixia ocasionada por el vómito, ya que cuando una persona está totalmente enajenada por causa del alcohol puede ahogarse con su propio vomito al no poder responder a esta necesidad.

Después de ser ingerido, el alcohol tarda unos treinta o noventa minutos en llegar a la sangre. Es en ese momento que se reducen los azúcares que se encuentran en ella, provocando una absoluta debilidad y agotamiento, lo cual sucede porque el alcohol acelera la transformación del glucógeno en glucosa, y esta se elimina más rápido.

Las fases de la intoxicación etílica

Luego de haber bebido alcohol aparecen los efectos por fases, dependiendo siempre de la cantidad que se haya ingerido:

– La primera es euforia, excitación, desinhibición y una conducta impulsiva.
– La segunda es la intoxicación. Cuando el organismo no está acostumbrado al alcohol se afecta el sistema nervioso, se pierde la capacidad de coordinar los movimientos y se pierde el equilibrio; el alcohol provoca también depresión y pérdida de calor del organismo.
– La tercera es la fase hipnótica, de mucha confusión, en la que se produce irritabilidad, agitación, sueño, náuseas, vómitos y cefalea.
– La cuarta fase es anestésica y de estupor: se dicen palabras incoherentes, disminuye notablemente la consciencia, se pierde la fuerza muscular, no se controlan los deseos de orinar, se dificulta la respiración.
– La quinta fase es la bulbar o de muerte, y en ella se entra en shock cardiovascular, se produce paro respiratorio y llega la muerte.

En detalle: los efectos del consumo de alcohol en el cuerpo

Conoce los principales efectos del alcohol en el cuerpo en la siguiente infografía:

 

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El cerebro y el sistema nervioso

– El frecuente consumo de alcohol afecta gravemente las funciones cerebrales, en primer lugar a las emociones, provocando cambios súbitos de humor, se altera el control de la motricidad, provocando mala pronunciación, reacciones muy lentas y pérdida del equilibrio.
– Puede alterar la acción de los neurotransmisores, modificando su estructura y función. Lo cual produce una serie de efectos, como la capacidad de reacción, los reflejos son retardados, se pierde la capacidad de coordinar movimientos, se producen temblores y alucinaciones, se pierde el autocontrol, la memoria, la capacidad de concentración y las funciones motoras se alteran gravemente.
– Todos estos efectos juntos son los causantes de una gran cantidad de accidentes laborales y de tránsito los cuales han terminado con la vida de un considerable número de personas en todo el mundo.
– El alcohol causa graves daños en las células cerebrales, como también a los nervios periféricos, estos daños pueden ser permanentes
– El alcohol también ocasiona la disminución de la vitamina B1, lo cual causa la enfermedad de Wernicke-Korsakoff, la cual provoca la alteración de los sentimientos, pensamientos y la memoria.
– Produce trastornos del sueño en la gran mayoría de las personas que consumen alcohol con mucha frecuencia.
– Además estas personas con frecuencia se aíslan de su entorno social laboral y familiar, lo cual provoca el abandono de las familias, divorcios y la pérdida del empleo lo que puede provocar una profunda depresión y en la mayoría de los casos termina en suicidios.
– Se presentan periodos de anemia, con alteraciones en la memoria condición que puede durar algunos minutos, horas o incluso algunos días.

En el corazón y el aparato respiratorio

– Aumenta la actividad cardíaca.
– El consumo de dosis muy elevadas puede aumentar la presión sanguínea o presión arterial, ocasionando daños en el musculo cardíaco debido al efecto tóxico del alcohol.
– Se debilita el músculo cardíaco y por lo tanto la capacidad para bombear se ve disminuida.
– Produce vasodilatación periférica, lo que ocasiona enrojecimiento de la piel y aumento de la temperatura superficial de la piel.

En el aparato digestivo: estómago, páncreas, hígado y esófago

– Todas las molestias gástricas se deben a que el etanol erosiona e irrita la mucosa gástrica, provocando ardor estomacal, el cual se puede ver incrementado si se toman diferentes clases de licores a la vez.
– El alcohol aumenta la producción de ácido gástrico, provocando irritación e inflamación en las paredes del estómago, lo que puede provocar úlceras y hemorragias internas que pueden ser fatales.
– El alto consumo de alcohol puede ocasionar cáncer de estómago, de laringe, de esófago y de páncreas.
– Puede provocar esofagitis, o sea la inflamación del esófago, además varices esofágicas sangrantes.
– Se produce pancreatitis aguda, que es la inflamación severa del páncreas, lo cual puede llevar a la muerte.
– La pancreatitis también puede ser crónica provocando un intenso dolor permanente.
– El consumo de alcohol puede llevar a la persona a sufrir de diabetes tipo ll, con las graves consecuencias que esta enfermedad provoca en las personas que la padecen.
– El órgano que se encarga de metabolizar el alcohol es el hígado, las enzimas del hígado transforman el alcohol primero en acetaldehído y luego en acetato y otros compuestos. El proceso es muy lento, por lo tanto produce daños en los tejidos del hígado.
– Por la irritación y la inflamación celular hepática es probable que se desarrolle una hepatitis alcohólica, de esta manera el hígado se puede afectar transformándose primero en hígado graso, luego puede llegar a la hepatitis y luego a la cirrosis, terminando por desarrollar cáncer de hígado produciendo la muerte.
– Otras alteraciones de este órgano pueden ser la ictericia, o sea el color amarillo de la piel, la esclerótica y la acumulación de líquidos en las extremidades.
– La función renal se ve alterada ya que la hormona antidiurética reduce sus niveles, lo cual provoca deshidratación.
– El alcohol aporta una gran cantidad de calorías con muy poco valor nutritivo, impide la absorción de algunos minerales y vitaminas, elimina el apetito, provocando desnutrición.

En la sangre

– Impide la producción de glóbulos blancos y rojos.
– Cuando no hay suficiente cantidad de glóbulos rojos para transportar el oxigeno se produce la anemia magaloblástica.

En el sistema inmunitario y reproductor

– La falta de los glóbulos blancos produce la falla del sistema inmunológico, lo cual aumenta el riesgo de adquirir infecciones bacterianas y virales.
– Disminuye el deseo sexual.
– Puede ser causante de infertilidad y disfunción eréctil.

En el embarazo y en el feto

– El consumo de alcohol durante el embarazo puede provocar en el feto el síndrome alcohólico fetal, los síntomas de esta condición se manifiestan en el retardo de crecimiento, alteración en los rasgos cráneo-faciales, malformaciones cardíacas, hepáticas, renales y oculares.
– El daño más grave se produce en el sistema nervioso central del feto, en el cual se puede producir un marcado retraso mental.

Síndrome de dependencia alcohólica, o alcoholismo

Este es uno de los problemas más graves que conlleva el consumo desaforado e incontrolable de alcohol debido a la gran cantidad de síntomas y patologías que se asocian al alcoholismo.

 

 

* Con información de Mejor con Salud

 

 

Denisse Espinoza